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Factura electrónica y pymes: cómo prepararte sin volverte loco

Patricia

No sé por dónde empezar… y me da miedo decirlo en voz alta

Cada vez que alguien nos dice “tengo que hablar con vosotras de esto de la factura electrónica… pero no entiendo nada”, nos damos cuenta de lo solos que se sienten muchos pequeños empresarios. No es desinterés, ni dejadez. Es miedo al cambio, falta de tiempo y una sensación constante de ir por detrás.

Entre la Ley Crea y Crece, y eso que suena tan raro —Veri*factu—, lo que hay es un montón de preguntas sin respuesta. ¿Qué tengo que hacer? ¿Me tengo que cambiar de programa? ¿Esto ya es obligatorio? ¿Me van a sancionar si no lo hago?

Y mientras tanto, la vida sigue. Clientes que no esperan, facturas por emitir, proveedores que no entienden de normativa. Y tú… tú ahí en medio, tratando de hacer lo mejor posible.

¿Te suena alguna de estas situaciones?

Seguro que más de una te resulta familiar:

  1. Sigues con hojas de Excel y facturas en PDF, pero has oído que eso pronto no servirá.
  2. No entiendes bien qué cambia con la factura electrónica ni cuándo empieza a ser obligatoria.
  3. Tienes miedo de que Hacienda te pille mal preparado y acabes con una sanción.
  4. Te agobia la idea de tener que aprender un software nuevo sin saber por dónde empezar.
  5. No ves con claridad cuánto ganas o cuánto gastas al mes, y lo sabes solo cuando llega el trimestre.

Estas situaciones no son culpa tuya. Nadie te ha explicado cómo adaptarte. Pero el cambio no solo es inevitable… ya ha empezado.

Hay otra forma de llevar tu negocio

Lo que más desgasta no es tener que facturar, presentar impuestos o cuadrar las cuentas. Lo que agota es hacerlo sin herramientas, sin orden y sin ayuda. Sentir que todo depende de ti y que nunca estás al día.

Por eso trabajamos con herramientas como Holded o NCS software, que hacen que tu contabilidad funcione sola en segundo plano. Que puedas emitir una factura desde el móvil. Ver tus resultados sin mover un dedo. Saber en qué punto estás sin tener que preguntar a nadie.

No se trata solo de cumplir con la ley. Se trata de algo más profundo: devolverle a tu negocio el control, la calma y la previsión. Porque cuando las cosas están en su sitio, te da menos miedo crecer. Te atreves a delegar. Te vas un fin de semana sin mirar el correo cada hora

¿Empezamos?

Si todo esto te suena, si lo has pensado pero no has sabido a quién preguntar… este es el momento.

Escríbenos y en 30 minutos te explicamos cómo adaptar tu contabilidad a lo que viene sin complicaciones.

Con acompañamiento, con herramientas que te ayudan, y con palabras que entiendes.

Hazlo por tu tranquilidad. Hazlo por tu negocio. Hazlo por ti.

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